Sumérgete con todos tus sentidos
Lindo y querido México.
Mérida, la intersección entre historia y cultura.
Donde la presencia de las raíces mayas permanece fuerte y presente. Mezclándose con la arquitectura europea y la influencia de la colonización.
Donde los yucatecos con su castellano “aporreado” son orgullosos de su herencia mestiza, con todavía un 60% de la población maya.
La fusión entre la influencia hispánica y el origen indígena han caracterizado Mérida y la Península de Yucatán por varios siglos, con sus representaciones culturales.
La podemos percibir en la vida cotidiana aquí.
La gente sigue llevando la ropa tradicional, creada con sus talentos artesanales e imprimiendo sus creencias.
Dentro de las tradiciones yucatecas, por ejemplo, encontramos la celebración de la muerte, donde los vivos le rinden homenaje a los seres queridos que han fallecido.
En Yucatán, se conoce como Janaal Pixán, que en lengua maya significa «comida de las ánimas».
Quédate al pendiente del el artículo que publicaremos el próximo 7 de noviembre en el que le daremos una vista íntima a esta celebración.
Este contraste entre la presencia de la cultura española que impactó la región y la cultura maya es omnipresente.
Conociendo de primera mano la arquitectura europea y los rasgos de su influencia, me siento como en una película: la construcción de las casa para los coloniales, en contraste con la composición de la vegetación tropical.
Puedo sentir esta humedad, este calor y la presencia de tantas energías; de confrontaciones que he podido ver en libros de historia y películas.
La fusión de dos mundos
Los conquistadores llegaron para imponer su manera de ser, creyendo que era mejor, pero no se dieron cuenta de la fuerza de la nativos.
No pudieron quitar la vibración del lugar, porque la energía de la tierra y de sus orígenes es más fuerte, más poderosa.
La presencia de la naturaleza es tan fuerte. Mira las nubes y enfócate en su personalidad. Nos encerramos en un tramo de vida cotidiana olvidándonos de los que nos rodea.
El rastro de ambos legados, europeo y americano, convergiendo en un solo punto, causó un impacto en mí al conocer a esta mujer en el mero centro de Mérida.
Mira su blusa artesanal típica de Yucatán, el llamado huipil, con el bordado tradicional que se complementa con el rosario que pende de su cuello, como resultado de la integración de ambas cosmovisiones. El triunfo de la cruz impuesta por los españoles.
Su mirada tan intensa y llena de historia . Podía ver sus ancestros brillando a través de ella.
Mérida está llena de vida. Puedes llenar tus sentidos cuando caminas por estas tierras.
Conocí otra parte de México en estas calles, donde la gente caminan sin dudas ni preocupaciones.
Aquí se siente uno vivo con este calor que cala hasta tus huesos.
Explorando la calles puedo sentir el latido de mi corazón, conectándose con el de Mérida. Viviendo en simbiosis. Todo mi ser aprendiendo y siendo consciente de lo que me rodea.
Siéntate por un momento y observa tu propia ciudad.
¿Cuándo fue la última vez que de verdad la miraste y la tomaste en cuenta?
Sé consciente de la diversidad de tu cultura y su riqueza. Es una suerte tener una historia tan plena. Acepta las diferencias y entiende que se puede aprender uno del otro.
Te invito a explorar tu entorno y capturarlo.
Para eso hemos preparado dos Workshops de Fotografía que de seguro te serán útiles.